El fin de semana empezó torcido, en todos los medios de comunicación empezaban a hablar del 10%, del 50%, del 100%... la FIA se había propuesto ser la protagonista del Gran Premio de Silverstone. Los alerones soplados eran el nuevo enfrentamiento entre equipos y FIA. Después del GP de Europa, en Valencia, se había acordado que a partir de Silvertone se prohibirían estos alerones lo que provocó el enfado en Red Bull mientras que otros equipos apoyaban esta medida. Al final entre unos y otros lo dejaron al 10%.
El otro protagonista en la clasificación del sábado fue la lluvia. En la Q1 la lluvia hizo acto de presencia a falta de 6 minutos del final perjudicando a Jaime Alguersuari que no pudo pasar de ronda. La Q2 no trajo sorpresas mientras que en la Q3 se certificó que los Ferrari siguen acortando distancias con los Red Bull. Webber consiguió la pole por delante de su compañero, el líder del mundial Vettel y tercero Fernando Alonso.
El domingo, la lluvia también hizo acto de presencia. Minutos antes de que empezara la carrera una tormenta calló sobre el circuito y provocó las dudas sobre que neumáticos había que utilizar en la primera parte de la carrera, definitivamente los intermedios fueron los utilizados por los pilotos ya que en algunas zonas del circuito había mucha agua acumulada.
La salida fue muy limpia sin apenas incidentes. Vettel le ganó la posición a su compañero de equipo y de nuevo se ponía líder de una carrera, Alonso se acercaba a Webber mientras que el alemán aumentaba su distancia sobre los demás pilotos. En la vuelta 8, Webber se sale de la trazada y Fernando Alonso consigue adelantarle, el asturiano se colocaba segundo entre los dos Red Bull.
Ya en la vuelta 12, había empezado el carrusel de pasos por boxes. Los neumáticos secos eran el recambio de los intermedios con la pista ya totalmente seca. Hamilton que venía desde la décima posición subía puestos de forma asombrosa e incluso llegó a adelantar a Alonso, aunque en la vuelta 23, el asturiano conseguía de nuevo adelantarle.
En la vuelta 26, los mecánicos de Red Bull fallaban por primera vez, Webber hacía una parada muy lenta lo que le benefició a Alonso para volver a subir una posición. En la vuelta siguiente, pasaron por boxes Alonso y Vettel. De nuevo los mecánicos de Red Bull fallaban en la parada y Alonso adelantaba a Vettel. Fernando Alonso se situaba líder de la carrera, algo que a principio de temporada estaba demasiado lejos y con lo que solo podía soñar.
A partir de ahí el reinado del asturiano fue rotundo, cada vez sacaba más ventaja a los Red Bull y Hamilton tenía problemas de consumo lo que le impedía ir a fondo ya que podía quedarse sin gasolina en el último tramo de la carrera. Ya solo quedaba un nuevo paso por boxes que se produjo sin mayores problemas salvo para Button que no le apretaron una rueda y la perdió a la salida del Pit Lane.
A dos vueltas del final Vettel y Webber lucharon por la segunda posición y el australiano pudo superarle demostrando que no lo hizo porque no le dejaron en su equipo. Fernando Alonso ganaba su la primera carrera del mundial y abre un poco las alternativas de cara al mundial.
La nueva cita será el 24 de julio en Nurburgring, Alemania.
Fotografías:
1,2,3,4,5,6: lne.es
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