Drive in the rain

Cuando todavía España soñaba, en Corea, un hombre salía de sus sueños en los que conseguía un Mundial del Formula 1 para intentar hacerlos realidad.

Cuando algunos nos quitábamos las legañas para ver una nueva carrera nos despertábamos de golpe al ver la lluvia y el estado de la pista en la que se encontraba. Todos los fantasmas a un accidente y a que el coche no funcionara aparecieran de golpe.

Alonso tan tranquilo aparentemente estaba centrado en no cometer errores que pudieran hacer que sus aspiraciones al título se acabaran.

Las prisas por acabar un circuito que no debería de haber sido sede en esta temporada de una prueba del mundial pasaron factura, el asfalto no drenaba el agua que se depositaba en él y aunque la lluvia fuera fina en la pista había grandes charcos que hacían que fuera impracticable. La salida tuvo que ser aplazada media hora y cuando por fin se dio comienzo a la carrera tuvo que ser detrás de Safety Car para evitar que todos los coches acabaran fuera en la primera curva.

Apenas 4 vueltas después tuvo que ser suspendida la carrera debido a las quejas que muchos de los pilotos hacían a sus mecánicos a través de las radios de los equipos. Cuando por fin se volvió a lanzar la carrera de nuevo se tuvo que hacer con el coche de seguridad, había mucha menos agua que al principio pero la pista estaba peligrosa. Tuvieron que pasar 17 vueltas (muchos defienden que habrían sido más si no hubiera sido por la gasolina) para que el Safety car dejara paso a los pilotos y se lanzara la carrera.

La clarificación no se había movido, Vettel, Webber, Alonso y Hamilton ocupaban las 4 primeras posiciones. Hamilton intentaba ir a la caza de Alonso pero su mecánica no parecía en perfectas condiciones. Alonso con una estrategia muy conservadora se limitaría a esperar un error de los que encabezaban la carrera.

El asturiano solo tuvo que esperar unas vueltas cuando Webber se quedo fuera de la carrera después de hacer un trompo y ser embestido involuntariamente por Nico Rosberg. Alonso ya estaba segundo a la caza de Vettel pero con la silueta detrás de Hamilton.

Los pasos por boxes se hicieron necesarios, las ruedas de lluvia extrema estaban haciendo estragos a los pilotos y los pilotos entraron a cambiar las ruedas. Vettel y Alonso fueron los últimos en hacerlo en lo que fue una estrategia calcada entre ambos para evitar perder la posición por parte de Vettel y Alonso intentaría ganarla. El cambio de Vettel fue perfecto pero el de Alonso tuvo sus problemas. La tuerca de la rueda delantera derecha salió despedida y tuvo que ser sustituida con otra y perdieron unos segundos muy valiosos.

En ese cambio de ruedas, Fernando perdió la segunda posición en favor de Hamilton, pero en una pasada de frenada pocas vueltas después, el inglés se pasaría de frenada lo que le facilitó el adelantamiento a Alonso. De nuevo segundo, ahora la meta era presionar a Vettel para que pudiera forzar un error al verse obligado a ir al límite.

El adelantamiento a Vettel fue sospechosamente fácil y una curva después se descubrió el por qué. El motor del Red Bull dijo basta y se rompió. Vettel abandonaba la carrera y dos de los rivales de Alonso por el título estaban fuera. Ahora era el momento de guardar ruedas que estaban ya en las últimas y no arriesgar en ningún momento. La meta era llegar al final de la carrera en primera posición, lo que supondría situarse en lo más alto del mundial.

Cerca de las once de la mañana en España la bandera a cuadros hondeaba en el aire coreano dándole la victoria y el liderato a Fernando Alonso. Después de una carrera en la que tuvo de todo, lluvia, coche de seguridad, accidentes, adelantamientos, piques, emoción... Alonso había conseguido su objetivo.

Los gestos de victoria se empezaron a ver en cuando se bajo del coche, gritos, saltos y alegría eran visibles en un asturiano al que solo le quedan dos carreras para ser Tricampeón del Mundo. No tanto nada más que llegar a la rueda de prensa oficial de la FIA para decir que el Mundial 2011 no estaba ganado y que todavía quedaban dos carreras aunque asumía que habían dado un paso al frente. Un paso al frente que hay que ratificar en Brasil y en Abu Dhabi.

Los números y calculadoras empezaron a echar humo. Entre las mil combinaciones que nos podemos encontrar la más sencilla que da a Alonso como campeón en Brasil seria: Si Alonso gana la carrera y Webber como mucho es quinto, el mundial se viene para España. Si no habrá que esperar a Abu Dhabi.

Corea consiguió tener su Gran Premio este año aun cuando no estaban preparados, lo mejor es que ya ha acabado y que el año que viene será una gran pista, sobre todo porque tendrán el tiempo suficiente para prepararla.

Ahora: Destino Brasil

Fotografías:

1,2,3,4,5: as.com